JAUREGUÍ METE LA PATA EL DÍA DE SU ESTRENO DE MINISTRO CON ZAPATERO

Jáuregui intentó sacar el pie del charco en el que él solo se había metido matizando dos veces sus palabras.

EXPLOSIVAS DECLARACIONES

El ministro de la Presidencia mete en un gran lío a ZP en su estreno

Ana I. Martín

El presidente dijo de Jáuregui que "se explica muy bien", pero no podía imaginar que a las primeras de cambio se iba a meter él solo en un barrizal del que intentó salir y acabó peor.

Peor no podría haber sido la puesta de largo en el Congreso del flamante ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui. Y eso que el mismo día que José Luis Rodríguez Zapatero le llamó a su vera, éste dijo de él: "Se explica muy bien".

Lo que no imaginaba entonces el presidente del Gobierno es que, a las primeras de cambio, Jáuregui se iba a meter en un barrizal tremendo. Y todo por culpa de una interpelación urgente que defendió este miércoles en el hemiciclo la portavoz de ICV, Nuria Bonaventura, sobre "el papel que el Gobierno de España está desempeñando respecto a la dramática situación que padece el Sáhara Occidental". En teoría debía haber sido la titular de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, quien defendiera la postura del Ejecutivo, pero al encontrarse de viaje le cayó de rebote a Jáuregui.  

Y, en un momento de su discurso, se le ocurrió decir textualmente, al hilo de los impedimentos que Marruecos está poniendo a periodistas y diputados extranjeros para acceder al campamento saharaui instalado en las afueras de El Aaiún: "Puede someterse a discusión, pero no podemos negar que la admisión en territorio forma parte del núcleo duro de la soberanía de un país". Es decir, que un ministro de Zapatero estaba reconociendo por primera vez la soberanía de Marruecos sobre la antigua colonia española. Y no fue un lapsus, sino que se trataba de su primera intervención y la llevaba por escrito.

Las explosivas declaraciones del ministro de la Presidencia corrieron como la pólvora por las ediciones digitales de los periódicos -la de El Mundo fue la primera en darlo- y los boletines de radio. El revuelo que se creó en cuestión de minutos fue tal que Jáuregui se vio obligado a trazar un plan para salvar el cuello. Así que el ex eurodiputado reunió a unos cuantos periodistas en el pasillo que conduce al hemiciclo del Congreso e improvisó lo que en el argot periodístico se denomina un canutazo. Pero fue peor el remedio que la enfermedad, como constató este periódico.

"No he hecho ningún reconocimiento de soberanía de Marruecos sobre un contencioso que está pendiente. Simplemente he querido decir que en la actualidad es Marruecos el que determina, por su capacidad de administrar ese territorio, quién entra y quién no entra (en el Sáhara). Ése ha sido el sentido de mis palabras", comenzó diciendo. Pero a renglón seguido se enredó él solo con aquello de la potencia administradora y las resoluciones de la ONU, hasta el punto de que varios periodistas tuvieron que recordarle que las Naciones Unidas siempre ha considerado el Sáhara como un territorio ocupado.  

Ahí no acabó la cosa. Como se había vuelto a liar él solo, al cabo de unos minutos hizo una breve comparecencia en la zona de la Cámara denominada escritorio para volver, por tercera vez, sobre lo mismo. Dos rectificaciones le hicieron falta a Jáuregui para decir lo que quería decir. Y él es el que según Zapatero se explica "muy bien".