Gallardón, ahora contra las librerías de Madrid
La última ocurrencia
del Alcalde de Madrid
es una campaña de inspecciones
las librerías de la capital
que supondrá
que un centenar de ellas
reciban la visita
de técnicos de Calidad y Consumo.
El sector del libro,
que ha visto caer sus ventas,
se ve ahora además
en el punto de mira municipal.
NOTA DE BRUTTHUS
-
¿Querrás decir Gallardonal?
(Volver)
-
Rebel dijo el día 9 de Junio de 2010 a las 10:33:18:
A mi me sorprende mucho que en último párrafo se haga referencia al "libro electrónico" como si fuera una novedad. Para la ministra Sinde también es una novedad.
Comprendo que se refieren, basicamente, a una comercialización "en gran escala", pero esto solamente se puede decir en un país sumamente retrasado en el uso y comprensión de Internet. Se ha conseguido que la gente tenga miedo a Internet y esto no es más que una manipulación de la realidad.
Es infinitamente más grave lo que sucede a diario en cualquier calle de nuestras ciudades y no por eso nos encerramos en casa. Sin embargo el efecto de la propaganda es muy grande para quien no tiene interés es aprender por sí mismo.
Lo cierto es que el libro electrónico existe desde el momento en que aparece el documento electrónico, que es lo que ha provocado la desaparición de la máquina de escribir. No hay que confundir los sucios trucos que utilizan los fabricantes de dispositivos y periféricos para que utilicemos sus programas de software, con el objeto que realmente nos interesa.
Por ejemplo, si compras una cámara de fotos el fabricante pretende obligarte a que instales sus programas para estudiar tus costumbres, llenarte de propaganda y convencerte de que le compres a través de Internet. Estas prácticas son una estafa encubierta bajo el supuesto de que el comprador es un ignorante y no sabrá utilizar el producto que ha comprado. De eso es de lo que nos tienen que defender.
Es increíble que te compres un i-Pod -que vale un pastón- y para hacerlo funcionar tengas que tener ordenador y obligatoriamente debas descargarte el programa de Apple: "i-Tunes", que lleva más cosas de las que necesita el aparatito, desde luego.
En definitiva, no hay que confundir la "venta" de libros electrónicos y unos formatos "interesados" -que solamente utilizan determinadas maquinitas- con el concepto de libro electrónico.
Yo tengo una biblioteca electrónica en constante crecimiento y no me ha costado un duro y hace meses ya empecé una audiobiblioteca en mp3, que es realmente lo novedoso ahora mismo.
Son ejemplos de lo que puede hacer uno por sí mismo y no tener que depender de las propagandas ni las comercializaciones, salvo que uno lo quiera expresamente o no tenga más remedio.
Comprendo que se refieren, basicamente, a una comercialización "en gran escala", pero esto solamente se puede decir en un país sumamente retrasado en el uso y comprensión de Internet. Se ha conseguido que la gente tenga miedo a Internet y esto no es más que una manipulación de la realidad.
Es infinitamente más grave lo que sucede a diario en cualquier calle de nuestras ciudades y no por eso nos encerramos en casa. Sin embargo el efecto de la propaganda es muy grande para quien no tiene interés es aprender por sí mismo.
Lo cierto es que el libro electrónico existe desde el momento en que aparece el documento electrónico, que es lo que ha provocado la desaparición de la máquina de escribir. No hay que confundir los sucios trucos que utilizan los fabricantes de dispositivos y periféricos para que utilicemos sus programas de software, con el objeto que realmente nos interesa.
Por ejemplo, si compras una cámara de fotos el fabricante pretende obligarte a que instales sus programas para estudiar tus costumbres, llenarte de propaganda y convencerte de que le compres a través de Internet. Estas prácticas son una estafa encubierta bajo el supuesto de que el comprador es un ignorante y no sabrá utilizar el producto que ha comprado. De eso es de lo que nos tienen que defender.
Es increíble que te compres un i-Pod -que vale un pastón- y para hacerlo funcionar tengas que tener ordenador y obligatoriamente debas descargarte el programa de Apple: "i-Tunes", que lleva más cosas de las que necesita el aparatito, desde luego.
En definitiva, no hay que confundir la "venta" de libros electrónicos y unos formatos "interesados" -que solamente utilizan determinadas maquinitas- con el concepto de libro electrónico.
Yo tengo una biblioteca electrónica en constante crecimiento y no me ha costado un duro y hace meses ya empecé una audiobiblioteca en mp3, que es realmente lo novedoso ahora mismo.
Son ejemplos de lo que puede hacer uno por sí mismo y no tener que depender de las propagandas ni las comercializaciones, salvo que uno lo quiera expresamente o no tenga más remedio.
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