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NOTA DE BRUTTHUS:
Pongo lo de Chapuza periodística en el menú por la Iglesias, que es una "facedora de entuertos":
Es una pregunta y ella debería respondes, como seguro que Pedrito contestaría cuando le dijo que si había sido denunciado pou una declaración de renta.
Poca cosa la Sarnilla esta.
Poca cosa o casi nada.
Sobre todo si se la ve de pie.
La ves de pie, la miras y todo lo que ves es mala hostia concentrada.
Tiene que SER concentrada, porque sino, no podría caber TANTO, EN TAN POCO
-Es una pregunta y ella debería respondes, como seguro que Pedrito contestaría cuando le dijo que si había sido denunciado pou una declaración de renta.
Poca cosa la Sarnilla esta.
Poca cosa o casi nada.
Sobre todo si se la ve de pie.
La ves de pie, la miras y todo lo que ves es mala hostia concentrada.
Tiene que SER concentrada, porque sino, no podría caber TANTO, EN TAN POCO
Bronca entre Pedro Ruiz y María Antonia Iglesias: "¿Es puta o no es puta usted?"
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María Antonia Iglesias,
acostumbrada
a generar todo tipo de polemicas,
recibió de Pedro Ruiz su propia medicina.
Tras acusar al presentador de un fraude a Hacienda,
ésta abandonó el plató indignada por una frase
que antes ella había utilizado con él:
"¿es puta o no es puta, usted?” (Volver)
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nostrum dijo el día 19 de Abril de 2010 a las 19:22:38:
No soy yo admirador de Pedro Ruiz, precisamente, pero debo reconocer que le honra el haber puesto a la "monstrua" sectaria en su sitio.
Sólo le reprocho el haberse rebajado a pedirle disculpas. Para nada, ni por simple deferencia, estaba obligado a hacerlo. Hay que saber recibir de la misma medicina que vas dando.
Estas gentes o gentuzas, están tan convencidas de que los demás no tienen derecho a usar las mismas armas que ellos en el campo de batalla, que cuando esto ocurre, ya ven ustedes los resultados: ¡ay, mamá que me han pegado! ¡ay, grosero, ya no juego! (Cámbiese esto último por el habitual recital de epítetos y calificativos que todos conocemos, con el cual ya creen demostrada ante la chusma su superioridad cualitativa y moral, así como justificada su carencia absoluta de ningún valor).
Sólo le reprocho el haberse rebajado a pedirle disculpas. Para nada, ni por simple deferencia, estaba obligado a hacerlo. Hay que saber recibir de la misma medicina que vas dando.
Estas gentes o gentuzas, están tan convencidas de que los demás no tienen derecho a usar las mismas armas que ellos en el campo de batalla, que cuando esto ocurre, ya ven ustedes los resultados: ¡ay, mamá que me han pegado! ¡ay, grosero, ya no juego! (Cámbiese esto último por el habitual recital de epítetos y calificativos que todos conocemos, con el cual ya creen demostrada ante la chusma su superioridad cualitativa y moral, así como justificada su carencia absoluta de ningún valor).
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