jueves, 17 de septiembre de 2009

LA MENTIRA COMO ACCIÓN POLÍTICA

2 | Van Holden | 16/9/2009 - 15:55h

Una persona honesta que se equivoca,
no tiene reparo en reconocerlo,
eso le disculpa
y le engrandece por su humildad e inteligencia.

Todos nos equivocamos, pero si rectificamos, aprendemos y crecemos moral e intelectualmente.

No le pidas a un mentiroso que rectifique; si lo hiciera ya no sería mentiroso. La mentira es una forma de vida y un mundo paralelo de maldad, que da sustanciosos dividendos, con una sola condición, nunca reconozcas que has mentido; porque en ese preciso instante todo tu castillo de naipes construido a lo largo de mucho tiempo de falsedades que se sostienen unas a otras, se derrumba.

Todo es disculpable en esta vida, menos la mentira; porque la mentira siempre se hace a costa de alguien; sólo se puede mentir por legítima defensa, lo que no es el caso.

La lucha política actual en España no se libra en el campo de la ideología, la ideología es simplemente el parapeto; la lucha real es la que ha sido siempre desde que el hombre asomó los morros por el horizonte de la Tierra; la lucha por la verdad.

En esta lucha las armas son desiguales, siendo el campo de batalla el mismo (conquistar el favor de la masa social) el que ofrece a la masa mentiras bien envueltas y atractivas, juega con ventaja; el que ofrece a las masas la verdad cruda y poco atractiva, tiene las de perder, por mucho que sea moralmente superior.

Por eso la izquierda,
cuyo origen intelectual e ideológico
se basa en grandes mentiras
y se sostiene en ellas,
conquista a la masa social
(engendro amorfo y pestilente) ;

por su parte,
los que no basan su ideología en mentiras,
sólo pueden aspirar a conquistar la confianza del individuo,
porque éste sí está en condiciones de distinguir el bien del mal,
y la mentira de la verdad.

Por eso es tan importante para la izquierda
suprimir al individuo
y su libertad innata,
porque mientras haya un individuo libre,
que no les dé la razón,
habrá alguien que les denuncie
y muestre su auténtico rostro.

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