miércoles, 19 de octubre de 2011

MUCHA COSAS Y MUY BUENAS: SE LO PUEDO PROMETER Y PROMETO


-

De primero sopa de…

…y de segundo patatas con. Recuerdo un programa de Gomaespuma en el que un zumbao hacía una cancioncilla a cuenta del menú que siempre daban en una casa de comidas, que todos los días era igual o tan igual que nunca borraban la parte de la sopa ni la de las patatas. En este cochino país estamos en un plan parecido, puesto que llevamos cuarenta años, o quizá ya cuarenta y cinco dependiendo de que atrocidad de los aguerridos gudaris etarras consideremos el principio de ese asqueroso movimiento terrorista, mafioso y asesino que nació de la mano de los sacerdotes nazis amiguetes de Sabino.

Esta vez esta panda de indeseables son noticia gracias a otra panda de indeseables, traidores a la memoria de los mil muertos asesinados por la mano de los de la capucha. Se han juntado los indeseables de la pistola, los indeseables de la Union Jack para daltónicos discípulos del tal Sabino y los indeseables que mendigan un comunicadito para salvar los muebles electorales para lo que ellos llaman “conversaciones de paz”. En paz nos gustaría que nos dejaran los unos, los otros, los de más allá y la puta madre de todos ellos pero no hay manera. Seguimos teniendo que sufrir con la manipulación informativa y del lenguaje otro día más. Otro día más que nos sirven sopa de ignominia y patatas con carroña terrorista, convenientemente pasada por el pasapurés de los medios afines para que la piara de ovejas de encefalograma plano que aún hoy siguen votando a los unos y a los otros reciba su conveniente dosis, no vaya a ser que por fin evolucionen y les de a las ovejas por mandarles a tomar por el culo.

Son negociaciones, o más bien súplicas, pero no para la “paz” sino para unos tocar pelo y los otros seguir agarrados a las poltronas. Lo de unos no sorprende puesto es lo que llevan intentando desde que salieron de aquel seminario por la puerta principal y empezaron a hacer que salieran ataúdes por la puerta trasera de las iglesias, y la verdad es que lo de los otros tampoco sorprende demasiado aunque indigna aún más. Especialmente cuando hacen como si fuera cosa sólo de Jesusito y algunos colegas porque el pachilendacari no va porque no ha sido invitado, porque las consonantes finales de nuestro pasado salen en todos los sitios apoyando el asunto y dando lecciones morales y porque el traidor calvo pretende metérnosla doblada antes de que podamos enterrar su carrera política a golpe de papeleta dentro de cinco semanas menos un día.

Puesto que nos dan sopa de y patatas con, yo pienso acudir a las movilizaciones que las asociaciones de víctimas ya están organizando para que al menos podamos patalear contra esta política de traición a la memoria de todos los muertos, heridos y traumatizados por las atrocidades terroristas de los etarras. Y aunque no salgamos ni en TVE ni en la Secta ni en muchos otros medios allí estaremos, siendo muchos más que los indignadoflautas que tantas horas de televisión y tantas páginas de periódico y tantas horas de radio ocupan en esos medios que defienden estos desmanes para intentar evitar su inevitable quiebra una vez que se les acabe la mamandurria. Acudiré las veces que haga falta.

Si quieren caldo, les daremos tres tazas.

Griegos y eslovacos

Esta va a ser una barbaridad un poco caótica, ya se lo advierto, así que si no están muy frescos casi mejor lean la que le dediqué a otro filósofo toledano más de garrafón unos días atrás, que aún conseguirán reirse con ella, mientras que con esta el dolor de cabeza está asegurado aunque no se líen a cabezazos con el monitor.

Uno de mis lectores me ha preguntado esta mañana tras haber leído mi pesimista parida de hace dos días que si yo veía esperanza por algún lado, a lo cual no he podido sino contestarle que sí, pero que poca. Tras eso he tenido una agradable comida y una corta aunque no menos agradable sobremesa con un amigo también lector de estas mis barbaridades en las que hemos hablado de un montón de chorradas, como casi siempre, ninguna de ellas relacionada con el carajal en el que nos hallamos inmersos, al menos de forma directa. Tras ese refrescante interludio he vuelto a la cruda realidad de la, si me permiten el horrible anglicismo, indentura a la que nos sometemos de forma más o menos voluntaria para intentar hacer frente al resto de servidumbres que conforman nuestra vida diaria.

Tras hacer frente a los asuntos más inmediatos me he dado a la dulce práctica de la multitarea creativa durante la cual he dado en leer acerca de un pequeño y joven partido político eslovaco que ha provocado la caída del gobierno de su país, del que formaba parte en coalición, por anteponer sus principios e ideales y contestar que una polla como el cuerpo de un indio a la ruinosa petición de la Merkel y el Sarko a la ampliación del fondo de rescate para tapar los agujeros que los griegos se niegan a tapar porque ya habrá algún otro gilipollas que pague sus derroches. Resulta que estos señores de este pequeño país defienden lo que muchos llevamos años defendiendo: Que el que la haga la pague, y que si un gobierno lleva a su país a la quiebra, pues mala suerte, y que lo arreglen entre ellos aunque sea a pedradas en vez de que tengamos que pringarnos todos en el asqueroso juego del tocomocho a grandísima escala que es el contubernio de la deuda soberana. Resulta que estos señores eslovacos defienden lo mismo que la escuela austriaca de economía en este aspecto, que no es otra cosa que dejar quebrar alegremente a Grecia para empezar, y a quien tenga que quebrar para continuar y que cuando vuelvan a poner orden en sus cuentas y dejen de ser un peligro para los demás vuelvan a jugar con los mayores. Yo añado de mi coleto que una pasadita por el trullo para los responsables políticos de los desmanes ruinosos tampoco estaría de más, e incluso ejercería un efecto tremendamente salutífero sobre las posibles tentaciones de futuros gobiernos. También coincido con los eslovacos y los austriacos en su apreciación de que un escarmiento en la chepa griega no sólo no pondría en riesgo el euro sino que lo haría más fuerte a largo plazo, mientras que la continuación de los paños calientes y las ñapas cortoplacistas sólo hará que todos desconfiemos de todos.

Me temo que en esto soy un poco Diógenes y bastante cínico, aunque sólo sea de boquilla (o en este caso de tecladillo), pero aún así da gusto que la pequeña linternita de mi mirada dé con algún hombre de vez en cuando. Aunque sea pocas veces, leer ciertas cosas hace que me reconcilie aunque sea mínimamente con la raza del Homo Politicus. ¿Tendremos la suerte en España de que en algún momento tengamos algún partido modelo grano en el culo capaz de defender sus principios aunque eso les haga dejar de tocar moqueta y poltrona?. Lo dudo, pero, igual que contesté esta mañana a mi estimado lector, tengo la quizá remota esperanza de que en algún momento evolucionemos de piara de ovejas a rebaño de ovejas y aún más tarde a ovejas pensantes individuales, y forcemos la mano de una casta política que en este momento no representa ni a sus propios votantes, mucho menos a la mayoría de los electores. Mientras tanto, me alegraría de que estos señores eslovacos mejorasen sus ya decentes resultados electorales en los próximos comicios que los socialistas han forzado gracias a su defensa de su compromiso con su electorado.

Esta va por tí, Mariano: Deja de hacer deporte y ponerte de perfil un ratito, majo, que a lo mejor te iba mejor. O mejor, vete a tomar por el culo y deja a alguien a quien me resulte mucho menos asqueroso votar para conseguir vengarme de los hijoputas que nos han llevado a la ruina, que mi economía está jodida y no tengo eurobonos que me paguen el desinfectante tras agarrar una papeleta en la que no sólo sale tu baboso nombre sino que además, para añadir la ofensa a la herida, sale el del ruinoso faraón Gallardón.

Presente y futuro

Dice el refrán que agua pasada no mueve molino y, aunque soy bastante amigo de los chascarrillos de la sabiduría popular, en este caso no puedo estar más en desacuerdo con el colectivo Sancho Panza que forma la sopa primordial de la cultura española. Esta vez, en un alarde de esfuerzo al que más les vale no acostumbrarse, no sólo voy a contestar con otro refrán que refuta al anterior, aquel que dice que el que no aprende de sus errores pasados está condenado a repetirlos, sino que voy a avalar mi desacuerdo con cifras oficiales.

Según la encuesta del INE Proyección de la Población de España a Corto Plazo 2011–2021 no sólo la cosa está jodida ahora, sino que va a estar jodida en el futuro por más de una razón. No sólo la gestión del pavo psicótico y sus alegres y sectarios chorizos e incompetentes de los que por fin nos vamos a librar dentro de unos días ha sido nefasta, sino que además va a reforzar un dato del que no sé si tendrán culpa o no, y si la tienen será en mayor o menor medida. Este dato sin importancia aparente es la bajada de natalidad brutal que vivió España durante los 80 y los 90, que nos va a dejar un adelgazamiento en la pirámide poblacional esa que a los que estudiamos EGB sí nos enseñaron muy comparable a aquellos ejemplos que nos mostraban de países que habían atravesado una guerra. Para los que ahora tenemos cuarenta años o unos pocos más, que somos los últimos chorritos de esperma que no conocieron el condón ni la píldora es una noticia devastadora puesto que será matemáticamente imposible que los que vienen detrás puedan hacer frente a nuestras jubilaciones o a nuestra asistencia geriátrica.

La de por sí ya aplastante fuerza de los números en bruto se hace aún más patente si añadimos que lo que viene detrás de nosotros ya ni siquiera conoció una EGB devaluada como la nuestra sino que ha sido formada, por decir algo, en el ESO. Cualquiera de nosotros que tenga sobrinos, hijos, primos o conocidos en edad de estudiar secundaria, lo que antes era el final de la EGB y el BUP, sabrá de primera mano que lo que ahora pasa por educación secundaria no es más que un aparcadero de carne para que no engrose las listas de parados inempleables antes de tiempo, aunque al final lo acaben haciendo. Los que hayamos tenido que seleccionar personal en algún momento conocemos, además, la desagradable sensación de intentar buscar algo digno del término “trabajador” entre la inacabable sucesión de cachos de carne con ojos sin aptitud ni actitud que se presentan con ese asqueroso sentimiento de tener derecho a todo a los procesos de selección.

Volviendo a las expresiones populares, con estos mimbres habrá que tejer este cesto, aunque la tarea se presente un puntín más que hercúlea. Visto lo visto las dos únicas opciones mínimamente sensatas para intentar que no acabemos comiendo mierda debajo de un puente cuando tengamos setenta años será o bien largarnos corriendo al extranjero, o bien empezar a ahorrar ya con la vana esperanza de palmar no muy mayores, antes de comernos el poco patrimonio que podamos dejar a nuestros hijos.

Está claro que vamos a comer mierda, ahora la pregunta es si llegará a haber para todos. Lo dudo.

Pataletas toledanas

Este fin de semana sí, esta vez sí he conseguido algo con lo que echarme unas risas antes de caer agotado sobre la almohada tras esquivar durante otros cuantos días la cola del INEM. Quizá esta vez incluso haya más de una, aunque alguna de ellas significase repetirme, como son los casos de Bono llamando de nuevo calvo de mierda al tal Dávila o lo de Pepino el gasolinero diciendo gilipolleces una vez que le han pillado con las manos metidas hasta el sobaco en la masa del trinque. Así, que para no cansar a los dos o tres que aún se queman los ojos y las neuronas con las soplapolleces que me da por escribir voy a obviar a esos dos insignes prohombres y voy a mearle en la pierna a otro que es aún más tonto de los cojones que los anteriores y que tiene un cabreo moruno porque hasta los perroflautas pasan de sus imbecilidades.

El sujeto en cuestión se llama Guillermo, es hijo de un prestigioso cirujano y tiene ideales. Es un auténtico revolucionario. Un tipo que nació en la miseria más absoluta porque su padre seguro que ejercía su profesión por la patilla y le enseñó los verdaderos valores proletarios en los diez minutos que tenía para compartir con su retoño tras sufrir los rigores del capitalismo opresor durante todo el día dejándose los ojos operando a niños leprosos en la India. Otro jeta progre de la misma cuadra que los Bardem, y es que se sigue cumpliendo que en estos tiempos para ser radical izquierdoso a los cuarenta además de muy imbécil hay que ser bastante rico. Debe ser que como no tienen que currar para vivir se dedican a decirnos a los demás lo que debemos pensar. Les estamos muy agradecidos. No se hacen ni una pequeña idea de cuanto.

Seguro que entre el título y las pistas que he dado ya sabes ustedes que hablo del tal Gili Toledo, que anda el pobre absolutamente rabioso porque alguien le ha publicado una colección de soplapolleces en forma de entrevistas en las que no tengo ni puta idea de lo que dice ni quiero saberlo y que nadie se ha molestado ni en criticar. Yo tampoco pienso criticar la obrita porque tengo cosas mucho más importantes que hacer que leer las tonterías que pueda decir este tipo, como por ejemplo limpiarme las pelotillas de entre los dedos de los pies. Es más, creo que he leído el título por algún sitio y ya lo he olvidado.

Además, este desocupao ahora ha decidido juntarse con otros cuantos idiotas de parecida altura de miras y elevada catadura moral y montar un partidín para intentar despertar al pueblo de su adocenamiento político y para conseguir encender las conciencias de todos los oprimidos hijos de papá que ven que las subvenciones se acaban porque la vaca ya no da leche. Anda el tío como puta por rastrojo de bar de diseño en bar de diseño por la parte bohemia de Madrid persiguiendo al personal para que le firmen cuatro mil setecientas personas avalando el que puedan presentar su excelsa candidatura en la Comunidad de Madrid. Su familia creo que ha cambiado el domicilio a Segovia en cuanto se han enterado de que andaba pidiendo firmas para no tener que decirle que no al pobre, y es que da una penita que sea tan tonto, con lo majete que es. También he olvidado el nombre del asunto este, así que si tienen curiosidad vayan al google, que lo sabe todo.

Yo ya saben que soy mala persona, así que voy a proceder a meterle el dedo en el ojo a este cretino y le voy a decir que yo sé que tengo al menos tres lectores, y que uno de ellos no es mi padre porque no le he dicho que escribo estas cosas, que el pobre no tiene por qué enterarse de que la educación de su hijo se desperdicia de esta manera, así que estoy seguro de que al menos le gano por dos, y que ninguno de ellos llora de pena por tener un hijo tan idiota.

Sufre, tonto de la polla.

Entre los tres

Hace un par de días salió en algunos, sólo algunos como siempre, medios de comunicación la noticia de que un empresario gallego acusaba, con abundantes datos, de corrupción a un chupóptero del PP, un pesebrista del BNG y al inefable y alalo cucurbitáceo albino y ex-miope aunque le haya quedado la cara de topo que, ya por poco tiempo, ejerce de Ministro de Fomento y, para mayor escarnio si cabe, de Portavoz en este el peor gobierno que España ha sufrido en la historia reciente. Las reacciones de los tres sospechosos han sido bien distintas, a saber:

El del PP ya ha dimitido de algo, desconozco si de todo, pero al menos de algo. No tengo a bien conocer las virtudes de este señor, y me gustaría no haber llegado a tener noticia de ningún defecto más allá del pecado original de vivir de mi pasta, pero al menos ha hecho lo mínimamente correcto en estos casos, que es quitarse de enmedio hasta que la cosa se aclare, si es que se aclara.

El del BNG no sé si ha dicho esta boca es mía, aunque si lo ha hecho habrá sido en castrapo con lo cual no me tomaré el esfuerzo de indagar si lo ha hecho, puesto que tanta inmersión lingüística ha tenido un efecto curioso sobre mí, y es el de aborrecer todas las gili-lenguas que los nazionalistas han utilizado como herramienta de represión de cualquier cosa que oliera a España en algunas taifas. Además, siendo nazionalista tengo la seguridad al 99.9% de que el tipo en cuestión es un gilipollas, con lo cual aún menos interés en los regüeldos que pueda emitir. Como nota al margen añadiré que también ha dimitido y ha renunciado a ir en las listas por su partido para el Senado en las próximas elecciones, pero repito que me la pela, como si se hace la permanente.

Pepino ha dicho que: Y tú puta. No sólo no se mueve de la poltrona de la cual por suerte ya le vamos a mover los demás bien prontito, sino que además dice que el jueves se va a querellar contra el cantautor, contra el periódico que publicó la noticia inicialmente (mira que le tienen inquina los sociatas a Pedro J, coño, y todo porque les levanta todos los choriceos) y si este iletrado fuera como el piadoso Bono seguro que se querellaría hasta contra dios, pero parece ser que entre sus múltiples y patentes imbecilidades no tiene la de ser católico ni nada que se le parezca. Cualquier cosa menos dejar el único medio de vida que le permite hacerse chalets donde se los hace, porque con el pedazo de preparación y capacidad “inteletual” que tiene tendría problemas para ser el barrendero de su pueblo. Manda carallo.

A lo que yo iba, en cualquier caso, no es a lo que les pueda pasar a los presuntos implicados, que por otra parte ójala sea que les toque devolver la pasta que nos han birlado a los contribuyentes. Tampoco voy al curioso dato de que recibían los tres partidos con representación parlamentaria en la taifa gallega, sino al hecho de que ahora que parece que cambian los aires políticos van destapándose cosas que habían estado bien tapaditas mientras los alisios soplaban de forma constante hacia el mismo lado. Otra muestra más de la bajeza moral que afea a este bendito país desde hace tanto tiempo que incluso ha dado lugar al chiste ese que dice así:

-Me encontré el otro día en la calle a dos tíos pegando a otro.

-¿Y tú que hiciste?

-Pues me uní y entre los tres le metimos una mano de hostias que lo dejamos guapo.

Tenemos lo que nos merecemos.

Animales precavidos

Todavía recuerdo cuando Pedro Pacheco decidió quedarse bastante corto en su calificación de la justicia (lo escribo con minúsculas adrede) española. Además de disfrutar de sus cinco minutos de gloria en la tele, al pringao en cuestión lo empuraron porque menudos son los de las togas manchadas con el polvo del camino cuando les tocan la moral. Es por ello que para el tema de hoy voy a tratar de no decir nombres y de mantenerme en generalidades, no vaya a ser que en un ataque de cuernos les de por embestir contra este pobrecito hablador, y no cobro lo suficiente para enfrentarme a multas.

Hoy asisto con asombro a una noticia emanada directamente desde un tribunal español, en el que deciden que no es despectivo ni sexista refererirse a la santa con el femenino del nombre común del Lycalopex Griseus, ni citarla a una reunión en un camposanto con ella en el interior de una caja de pino. Barbaridades que atentan al menos común de los sentidos provenientes de los tribunales de este país antes llamado España estamos ya hartos de verlas. Supongo que mis lectores recordarán que si la señora o señorita lleva minifalda no es violación, que Bildu son demócratas de toda la vida, que las vasquitas aquellas tan majas no tenían nada que ver con ETA, que lo de Rumasa fué totalmente legal, que los únicos culpables del 23-F fueron los cuatro gilipollas a los que condenaron y que encima se callaron como hembras del anteriormente mencionado animalejo, que los autores del 11-M fueron los cuatro moros y los dos zumbaos asturianos, que el Faisán huele así porque ya estaba muerto, y así sucesivamente.

Lo más curioso de todos estos asuntos es que los nombres se repiten. No repetiré yo los nombres, porque todos los tenemos en la mente y porque no me atrevo, pero si indagan ustedes por el motivo de la gilipollez que hoy escribo verán un nombre tristemente famoso. Y si se toman la molestia de seguir el rastro de las diferentes hazañas judiciales de los últimos treinta años verán muchos nombres que aparecen una y otra vez en las actuaciones más estelares perpetradas tras el estrado.

Hay cachondeos que no son nada divertidos.

Impotencia y asco

Hoy es imposible intentar escribir alguna sandez más o menos ligerita para no sobrecargar las meninges antes del fin de semana. Es, una vez más, tal la avalancha de noticias catastróficamente malas que evacúan sobre nosotros los miembros del PSOE que ni todos los ambientadores de pino de todas las gasolineras españolas podrían tapar el hedor. Voy a hablar sólo sobre dos, que aunque no lo pudiera parecer a primera vista están relacionadas debido al período electoral en el que ya nos encontramos.

Por un lado nos cuentan los fachas del PP que les han llamado del gobierno y les han dicho que la situación económica es de tal gravedad que de aquí al veinte de noviembre puede pasar cualquier cosa. No sé si será verdad o no que ZP y sus alegres y ruinosos muchachos hayan en efecto llamado a sus muy posibles sucesores para decirles eso. De hecho no sé si será verdad o no que la situación es así de mala, aunque creo que sí lo es, o si es una táctica para que el Nerón Galáico se ponga aún más de perfil y no apriete las tuercas en las fechas anteriores a las elecciones apelando a su sentido de estado y todas esas zarandajas. Sí creo que este deportista baboso es lo suficiéntemente imbécil como para que los del PSOE se la vuelvan a meter doblada y siga en su política del perfil bajo y el “esto se gana solo”. Vivimos en la impotencia: La del gobierno para hacer nada útil, la de la oposición para ejercer de tal y la de los pobres paganos que seguimos comiendo mierda, y al paso que vamos ya veremos si tan siquiera habrá mierda para todos.

La segunda noticia es la de la marioneta vasca de RbCb soltando en un discurso institucional que el terrorismo ha desaparecido y que ya está todo arreglao. El tufo goebbelsiano del titular, y la peste a podrido de lo que va detrás del titular dan tanto asco que ni siquiera los chicos del diario dizque independiente de la mañana han conseguido maquillar el asunto. En este artículo pueden ustedes leer la sibilina redacción que le dan al asunto. Hay mil muertos, muchos más heridos, infinidad de familiares y amigos de víctimas y en general todos aquellos que tenemos alguna semblanza de principios que ahora mismo nos estamos acordando de toda la parentela del Pachi, el Freddy y la madre que los parió a todos, que debió quedarse bien a gustito. Producen náuseas, ellos y sus amigos los pacíficos etarras.

De la nacionalización de cajas arruinadas, de las facturas perdidas en cajones, de los cinco millones de parados y de la general sensación de que nos vamos a ir a tomar por el culo más antes que después ya volveremos a hablar otro día, que es viernes y ya estoy suficientemente desmoralizado para que me dure hasta el lunes aunque no vea ninguna noticia más durante el fin de semana.

¡Eureka!

Acabo de leer algo divertidísimo acerca de una gran idea:

Merkel y el plan Eureka

Tras leer esto me ha dado por pensar que si el Nerón Galáico no fuera tan pan sin sal y tan memo, podría contraatacar a la catarata inacabable de demagogias tremendistas de RbCb diciendo que ojo, que si gana el PSOE lo mismo nos obligan a vender la Alhambra. No lo descarten, por si acaso. Lo de que tengamos que vender la Alhambra, digo, no que Rajoy se vaya a desagilipollar de pronto.

Precaución al volante

Quédense con este jeto de imbécil catalán con gafitas de imbécil catalán. Ténganlo en sus pensamientos cuando circulen por cualquiera de las carreteras sembradas de radares que adornan nuestra geografía. No hacerlo puede resultarles fatal… para el bolsillo.

De acuerdo con dvuelta.com este cleptócrata ha decidido que nos va a meter la mano en la cartera y nos va a quitar hasta las fotos de los críos antes de que el cambio de gobierno dé con sus posaderas en la puta calle, si no somos capaces de recurrir las multas que nos van a endiñar sin miramiento ninguno en los 54 días que quedan hasta las elecciones, más los que tarde el nuevo gobierno en poner orden en la olla podrida que es la DGT.

Urge por muchas razones una limpia en el Ministerio del Interior, pero este tipo indeseable no es de las menores.

Y que no me vengan con las gilipolleces habituales de que los controles de velocidad salvan vidas, que ya se está quedando muy vieja. Ni los puntos, ni los carísimos anuncios en medios de información amigos repletos de chacinería, ni los radares, ni la mierda de limitación a 110 hicieron nada por las cifras de muertos en carretera. Si bajan las cifras es porque los esbirros de este incompetente pesebrero ya se encargan de quitar las de ciertas comunidades autónomas con competencias de tráfico transferidas y de no contar a los que palman más de 24 horas después del talegazo, tomándonos, una vez más, por gilipollas. Es inconcebible que sigamos con los mismos límites de velocidad que hace treinta años con lo que han avanzado los automóviles y lo que han mejorado, en general, las carreteras, pero ahí seguimos y encima si dices cualquier cosa te echan a los muertos en cara. Matan a más gente el jubilado que no está ya para conducir o la imbécil que va a ochenta por el carril central que el que va a 150 por el carril izquierdo en una autovía en condiciones de buena visibilidad. Si permanecen estos límites es por afán recaudatorio, no por otra cosa. Malditos ladrones, coño.

Mira que muere gente buena en accidentes de moto…

-

No hay comentarios: