sábado, 19 de septiembre de 2009

EL INDEPENDENTISMO SE DERRUMBA EN QUEBEC

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Cortoletraje

Introito

http://www.elpais.com/articulo/internacional/independentismo/derrumba/Quebec/elpepiint/20070328elpepiint_2/Tes

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Astuto y oportunista

Con su aire de vendedor de coches usados, o mejor, de tractores con que afrontar las tareas del campo, su entorno natural, el líder de ADQ es el único político quebequés que ha conseguido que le llamen por su nombre de pila, Mario. Nació en Cacoma, un pueblo cercano a su circunscripción, Rivière-du-Loup, se licenció en Economía, antes de ser secretario general de las Juventudes del Partido Liberal, formación que abandonó en 1993 para formar la ADQ. Con Mario no hay peligro de que la vida intelectual o mundana desnaturalice su apego a la tierra y ponga fin a las certezas y al sentido común de los agricultores.Frente a los intelectuales, "los pianistas", les llama él, el líder adequista propone recetas simples para problemas complejos y un estilo, directo, frontal, cálido en el contacto personal, que ha conectado con las gentes desengañadas de la retórica oficial. Lo suyo son las propuestas vagas, adaptables, los valores de la familia, la comunidad, la patria, envueltos en un discurso retórico, desnudo de propuestas concretas, que ataca la omnipresencia del Estado y la presión fiscal. Prefiere pensar poco a pensar demasiado. Es un político astuto y oportunista, que sabe aprovechar sus oportunidades, tocar las teclas del descontento y remachar los clavos de la derrota del adversario.Dumont, de 36 años, pisa siempre tierra firme y es una persona intuitiva, lo suficiente como para descubrir una cantera de votos en el espinoso asunto de las medidas para la integración de las comunidades étnicas que los otros candidatos habían aparcado por prudencia. Casado y padre de tres hijos, Dumont encarna la familia típica del agro quebequés, conecta con las gentes conservadoras celosas de su modo de vida y sus valores, que recelan de los poderes económicos y políticos distantes y desprecian la sofisticación de la gran metrópoli, Montreal.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pragmatismo quebecois