Pedro - 22-11-2009 - 23:39:33h
Como dice Jorge, es falso que se puedan encontrar patrones que puedan anticipar nuestro comportamiento.
O como mínimo, requiere de un análisis muy exhaustivo (vamos de varias personas y muchos medios dedicados a cada persona).
Predecir el comportamiento de una persona es como mínimo tan difícil como predecir el tiempo de aquí a tres meses en una hectárea determinada.
De ahí que limitando los posibles excesos con la legislación protección de datos personales no tiene porque haber problemas.
Además, para un enfermo del corazón es formidable tener conoctado su marcapasos a un centro de urgencias y que este reciba un mensaje si se para, claro está, si él autoriza todo el mecanismo de vigilancia de su corazón y se cumple la legislación que prohíbe transmitir al hospital o entidad sanitaria esos datos a terceros.
Así que a mí me parece que el tal Stephen Baker parece de manía persecutoria y/o tiene un gran talento comercial para acercarse a las personas que padecen esa enfermedad, de modo que se está haciendo de oro con este libro morboso y catastrofista sobre fuerzas ocultas que nos controlan para manipularnos.
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